Chubb está constantemente comprometido con la sostenibilidad empresarial, social y ambiental. El pasado sábado 3 de agosto funcionarios de Chubb en Ecuador participaron en la reforestación de 400 plantas de Achupalla en el páramo andino del país, Papallacta. El páramo de Papallacta se encuentra a 4200 msnm en el Parque Nacional Cayambe-Coca, reserva natural de flora y fauna y hogar de especies andinas en peligro de extinción; entre esos, el Oso de Anteojos Andino.
La Achupalla es planta propia del páramo, mantienen la conservación hídrica de la tierra y a su vez es el único alimento natural del Oso Andino, sin embargo, se ha demostrado escasez de la planta en las áreas donde más habita este animal. Debido a la falta de Achupallas en la zona, el Oso se ha visto obligado a cruzar la carretera e invadir poblaciones en busca de comida; lo que ha causado la muerte de este animal. Es por eso qué el equipo de Chubb en Ecuador sostuvo la iniciativa de apoyar a proyectos de conservación de esta especie al plantar Achupallas en el área en donde más habita; de esta manera, se evita la migración del Oso a áreas en donde no puede ser protegido.
Este gran día comenzó cuando los funcionarios voluntarios partieron en buses desde las oficinas de Chubb en Quito hacia el páramo de Papallacta, en donde se dio a cabo la actividad de reforestación. Junto a los Scouts del Ecuador y Paramédicos, los funcionarios llegaron a la casa de la comunidad de los Guardaparques del sector, donde se les detallo el propósito de la reforestación y el gran impacto que tendrá en el proyecto de conservación del Oso Andino.
Llenos de ilusión por la actividad y comprometidos con el medio ambiente, los voluntarios se adentraron en el páramo a 5°C para la plantación de las Achupallas. A pesar de que el clima no estuvo en su favor se mantuvieron las ganas de aportar al proyecto de conservación de esta especie en peligro de extinción.
Luego de la reforestación, los voluntarios recorrieron el páramo y visitaron la laguna de Sucus, una de las principales fuentes naturales hidroeléctricas de las comunidades de la Sierra Ecuatoriana. Se recorrió un camino húmedo entre Pajonales, Helechos, árboles de Polylepis y paredes de rocas naturales; un camino que sin duda deja asombrado a quien lo circula.
El seguimiento del crecimiento de las plantas de Achupalla plantadas se hará junto a los Scouts del Ecuador en los próximos meses y años, asegurando de esta manera el alcance de Chubb y su apoyo en la preservación del Páramo y la conservación del Oso de Anteojos Andino.